jueves, agosto 16, 2007

MORRIÑA.




Este año habíamos pensado ir a Singapur y algún otro país de por allí. De hecho me estoy "empollando" la guía de Lonely planet de Pe a pá. La intención es volver a reunirnos con Greg y Sean aunque tengamos que ir a la otra punta del mundo. Pues bien, pasa el tiempo y el problema es que mi cabeza se va hacía el norte, no lo puedo remediar. Debería estar soñando con Singapur, otra cultura, un viaje más exótico, diferente...pero es que mi corazoncito late por el norte y no sé si a última hora cambiaré el rumbo de mis planes y decidiré largarme a Suecia, o de nuevo a Noruega, o quien sabe si a Finlandia. Por otro lado tengo la contradicción de no querer centrar exclusivamente mis vacaciones de cada año en los mismos lugares. Pasión enfermiza. Pienso que quizás conocer Asia me hipnotice y descubra que me entusiasma, aunque si soy sincera lo dudo muchísimo pero la mejor forma de confirmar mi teoría es llevándola a la práctica, así que, bueno, supongo que iré a Singapur a buscar lo que se me haya perdido por allí, que no sé muy bien lo que es. O quizás sea mi deseado encuentro con Sean y Greg, algo que me hace especialmente ilusión y sólo por eso merece la pena. Eso sí, hoy pienso y tengo morriña de la sensación de frio en mi rostro, del silencio, de los anocheceres y amaneceres que cortan el hipo, del sonido de cada uno de mis pasos sobre la nieve, de los renos que corren libres por el bosque y se cruzan en el camino, de los lagos congelados, de los bloques de hielo y su música estruendosa al chocar contra la orilla del río Kemijoki, del Karjalanpiirakka de cada mañana(un pán delicioso), de las sonrisas anónimas y amables, del orden, de las mentalidades cuadradas que tanto tienen en común conmigo, del blanco que cubre las colinas y del verde que acompaña cada esquina de las ciudades o que cubre el monte, de las cascadas, de las cabezas rubias de los niños, de las bicicletas amontonadas, del vaho que sale de la boca y de la nariz, de las capas de ropa que me hacen gorda, de las largas e incomprensibles palabras en otro idioma, de las banderas, de los patines,de beber en las Kuksa,de las estrellas...podría seguir contándoos todas las cosas que echo de menos. Tengo morriña de todas las sensaciones que me regala el norte, mucha morriña y eso sólo se cura de una manera,el único pensamiento que calma está sensación de añoranza es que PRONTO VOLVERÉ, aunque sólo sea transportándome mentalmente hasta allí, que al final es otra forma de viajar.

2 comentarios:

eSteve dijo...

¡Y a ver cuándo os veo yo por aquí! ;-))
Seguro que Asia te va a gustar, aunque lo diga sin haber nunca estado. De todas formas, nosotros nos veremos pronto otra vez en tierra ibérica. ¡Un abrazo fuerte a tí, a Pedro y a Colás!

Lorena dijo...

Hola stefano!!!Pues si, dudas trascendentales, que me pienso las cosas mucho y ya está decidido pero tengo la espinita clavada de no visitar el norte este año, en fin, seguro que disfruto mucho igual aunque de otro modo. Un besote y a Tommy un achuchón.